Description
Hay días que parecen tejidos con hilos de hojas. En tonos rojos, ocres, verdes gastados. Este Paisaje de Otoño no se mira, se escucha: el crujir bajo los pies, el vuelo corto de los pájaros que ya no migran, el aire que huele a leña encendida.
Con su forma redonda —como si fuera una ventana abierta al bosque—, esta pieza textil de Pili Iglesias recoge retales, texturas y colores para componer un rincón de naturaleza íntima. Hojas de todos los tamaños y tonos (algunas suaves como pana, otras firmes como lino) se superponen con pequeñas aves bordadas que parecen estar a punto de alzar el vuelo.
Cada punto, cada superposición, tiene algo de manual y algo de memoria. No hay simetrías perfectas, ni hace falta: aquí lo bello es lo que se escapa un poco del borde. Una oda al otoño, sí, pero también a lo hecho con manos que saben mirar.
Es una pieza para quienes buscan objetos vintage para el hogar que no solo decoren, sino que cuenten algo. Para quienes sienten que una decoración rústica con cerámica o textiles tiene más sentido cuando viene con historia.
Y si al verla has sentido un poco de aire frío en la nariz o el impulso de coger una manta, puede que esta obra quiera acompañarte.
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